abril 28, 2024
Androfobia

Que es la androfobia?

Androfobia – miedo a los hombres.

Que es la androfobia?

La androfobia es una fobia social que consiste en el miedo al género masculino.

El término fue acuñado por los psicólogos estadounidenses Melvin Kinder y Connell Cowan.
La androfobia es una fobia social. Es tratable, pero hay un «pero». Pocos pacientes aceptan admitir que sufren androfobia. Si las mujeres del sexo débil tienen cierto miedo a los hombres, sus familiares y amigos cercanos, así como ellas mismas, creen que es una manifestación del feminismo.
Pero esta es una creencia totalmente errónea. El feminismo es un movimiento político y la androfobia es una enfermedad, un trastorno mental que tiene ciertos síntomas.


Causas del miedo a los hombres


La enfermedad puede aparecer a cualquier edad. Pero lo más frecuente es que la androfobia comience a los 20 años. Afecta principalmente a las mujeres, aunque se conocen casos de diagnóstico de la enfermedad también en hombres.
Las causas de la androfobia pueden ser:

  • Violencia grave que la paciente ha sufrido por parte de un hombre (violación);
  • Violencia en el comportamiento de un representante del sexo fuerte, que el paciente ha visto en sus ojos desde la infancia (peleas y discusiones familiares, golpes a una persona cercana, un incidente de grosería en un lugar público);
  • Ver películas en las que el hombre es el agresor y hace daño a los que le rodean en lugar de defenderse;
  • Crecer en un entorno femenino y escuchar comentarios poco halagadores sobre el sexo fuerte;
  • Un primer amor infructuoso, o más bien una experiencia sexual.
Androfobia


Síntomas de la androfobia


El síntoma principal de cualquier sociofobia es el miedo del paciente a comunicarse con un objeto que le produce miedo, confusión. En la androfobia se pueden observar los siguientes síntomas en el paciente

  • hiperemia facial o temblores;
  • vómitos;
  • sudoración profusa;
  • ganas de orinar, defecar;
  • pánico en los encuentros con el sexo fuerte.


Veamos los síntomas con un ejemplo concreto. La androfobia la sufrió en su día la actriz Tracey Lords, que a los 18 años ya era una famosa estrella del porno. Durante el rodaje de las películas, su cuerpo se cubría de sudor frío cada vez que un hombre la tocaba. Al mismo tiempo, Tracey tenía náuseas, que iban acompañadas de ataques de distonía vascular. Un complejo de inferioridad se apoderó de ella. Se volvió suicida. Como resultado, la joven actriz estuvo en una clínica para drogadictos y alcohólicos. Allí también le diagnosticaron androfobia. La enfermedad mental surgió de los abusos de su padre cuando tenía 11 años. Un tratamiento curó su androfobia.

miedo a los hombres


Tratamiento de la androfobia


Recientemente, los clínicos han hecho un progreso significativo en el tratamiento de la sociofobia (que incluye la androfobia), ya que han podido identificar claramente dos componentes de la enfermedad:

La presencia de un fuerte miedo social.


La incapacidad del paciente para empezar a hablar de sus problemas.
Por lo tanto, la primera tarea de los terapeutas en el tratamiento de la androfobia es reducir los temores sociales de los pacientes y, a continuación, desarrollar la capacidad de hablar de sus temores. Para que todo el curso tenga éxito, se recomienda lo siguiente:

Medicamentos psicotrópicos;
Técnicas psicoterapéuticas.


La mayoría de los terapeutas creen que el tratamiento psicoterapéutico de los pacientes es más eficaz que la medicación. Es bastante eficaz trabajar con el paciente para reducir sus miedos sociales. Durante el tratamiento, el terapeuta insta constantemente al paciente a que intente enfrentarse al objeto que desencadena el pánico y a que permanezca en la situación social creada hasta que se le pase el miedo. El curso del tratamiento consta de sesiones. Al cliente se le dan tareas para hacer, de las que informa al terapeuta.
La terapia de grupo suele ser muy eficaz con esta técnica. El cliente aprende a hablar de sus miedos y temores entre personas con problemas similares. Después de hablar de las situaciones desagradables, el cliente comienza a sentirse de manera diferente sobre la situación en la vida.
El entrenamiento en habilidades sociales es muy eficaz. Los terapeutas crean un modelo de la situación social y piden al cliente que desempeñe un papel. El paciente y el médico ensayan el nuevo comportamiento con el objeto del miedo. Este juego de roles se realiza hasta que el paciente es capaz de comunicarse con el hombre virtual. El terapeuta anima y elogia al paciente cuando la tarea se completa con éxito.
La siguiente etapa debe ser la terapia de grupo, donde el cliente debe confirmar sus nuevas habilidades de ser social y no tener miedo de los hombres. De este modo, los miembros del grupo pueden señalar discretamente a los demás lo que sería un comportamiento inadecuado.
El entrenamiento en habilidades sociales ayuda a las personas a deshacerse de sus miedos y a tener éxito en la vida. Al fin y al cabo, muchas androfóbicas, por su miedo a los hombres, se ven obligadas a hacer cosas que no son de su agrado, ya que se adaptan constantemente a esta vida. Al hacerlo, pierden mucho en su desarrollo y carrera.