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Algunas personas tienen ataques de pánico patológicos cuando se encuentran con un objeto de miedo. En esta situación, la persona es incapaz de controlarse. El miedo a las ratas se produce no sólo ante roedores reales, sino también ante cualquier imagen del animal. La peculiaridad de cualquier fobia es que es irracional.
Incluso los elefantes temen a los ratones y las ratas. Lea nuestro artículo – Porque los elefantes tienen miedo a los ratones.
Los peligros de la enfermedad
Tener miedo de algo o de alguien es una parte normal de la psique. Sin embargo, si este sentimiento adquiere un carácter patológico, puede dar lugar a diversos problemas.
Importante: El desarrollo de la enfermedad puede producirse de forma gradual e inadvertida.
La ansiedad y la preocupación dificultan llevar una vida normal. En casos graves, pueden aparecer problemas en los sistemas nervioso y cardiovascular. La neurosis persistente puede provocar un infarto prematuro.
En casos graves, la fobia puede ir acompañada de un trastorno obsesivo-compulsivo. En ella, una persona se obsesiona con la realización de rituales que supuestamente la protegen de los problemas.
Diferentes fobias
Todo miedo patológico puede tener características especiales. No todo el mundo conoce el miedo a los ratones, como se denomina esta fobia. Los psicólogos llaman a este trastorno musofobia. Cuando se produce, la persona experimenta miedo sólo a los ratones, tanto salvajes como ornamentales.
A veces, el miedo a las ratas se denomina surifobia. En este caso, la persona sólo tiene miedo de los roedores grandes, y el resto no le causa temor. Cualquier fobia puede manifestarse en distintos grados. A algunas personas no les gusta ver animales vivos, a otras no les gusta ver fotos o películas.
Uno puede encontrarse con el nombre de mamofobia. No es sólo un miedo a los ratones, sino también a roedores de todo tipo: topillos, topos y otros.
El miedo a los murciélagos se llama quiroptofobia. Esta condición se caracteriza por la aversión a un solo tipo de animal. Una persona puede percibir a los demás como normales.
Las fobias suelen combinarse entre sí. Por lo tanto, no deje que se desarrollen, ya que pueden provocar graves problemas de salud.
Síntomas de la manifestación
El miedo a las ratas y los ratones no se convierte en una fobia de inmediato. Los primeros síntomas aparecen cuando la persona entra en contacto con los roedores. Al verlos, la persona se pone rígida, se adormece y sufre un ataque de pánico.
Incluso si un ratón se sienta y no tiene intención de acercarse, sigue causando miedo
Si una persona se encuentra con un roedor en la casa, seguirá buscando rastros del animal, pondrá trampas y tendrá miedo de quedarse en una habitación oscura.
Importante: En algunos casos, una persona empezará a pensar que hay un olor persistente a ratón en la habitación.
Cualquier crujido provocará ansiedad. Ni siquiera la presencia de un gato en casa calmará al paciente. La peculiaridad del miedo a los roedores es que la persona no puede explicar racionalmente su miedo.
La psicología distingue dos grupos de síntomas: los conductuales y los fisiológicos. La primera se caracteriza por sentimientos de angustia, un impulso obsesivo de buscar un roedor, etc.
La segunda se caracteriza por las manifestaciones corporales:
- Latidos rápidos del corazón;
- Aumento de la sudoración;
- Náuseas;
- Vómitos;
- Mareos;
- Dolor de cabeza y otros.
A medida que el miedo a los roedores progresa, la manifestación de los síntomas aumentará. En los casos graves, puede conducir a una incapacidad total para llevar una vida normal.
La musofobia puede considerarse una enfermedad de los tiempos modernos, ya que las ratas y los ratones viven tranquilamente en las zonas urbanas debido a la abundancia de vertederos. Podemos encontrarnos con ellos todos los días.
Causas del miedo A las ratas
Es normal experimentar sensaciones desagradables al ver roedores. Son portadores de varias enfermedades. Por lo tanto, inconscientemente una persona trata de evitar reunirse con ellos.
Importante: La fobia suele desarrollarse tras una situación traumática.
Si un niño es atacado por una rata o un ratón, desarrollará una fobia a repetir la historia. A veces los niños oyen chirridos en la oscuridad y encienden la luz. Cuando esto ocurre, pueden ver roedores en la habitación o en el catre. Esta imagen puede ser muy aterradora.
La fobia no siempre se produce en la infancia. También puede ocurrir en un adulto. Por ejemplo, una mujer querrá coger unos cereales de una bolsa de cereales y se encontrará con el cadáver de un ratón muerto, o verá un animal en la cocina.
A veces las ratas atacan a las personas, como puede ocurrir en el campo. Una persona puede no darse cuenta del animal y pisarlo. Después de un encuentro así, surge un miedo patológico.
También en las zonas urbanas existe la posibilidad de encontrar roedores. Viven cerca de los vertederos, en los basureros, y se pasean tranquilamente por las casas. Pocas personas disfrutan de un barrio así.
Las personas impulsivas, con tendencia a la hipocondría, pueden tomarse demasiado en serio la información sobre las enfermedades infecciosas. Los roedores son portadores de muchos tipos, desde la rabia hasta los parásitos. Por lo tanto, cualquier idea de encontrarse con ellos causa pánico.
Tanto las mujeres como los hombres son propensos a las fobias.
El miedo patológico a los ratones puede desarrollarse en un contexto de otros problemas. Con un alto nivel de ansiedad, cualquier cosa se percibe de forma aguda y negativa.
Cómo afrontar el problema
El tratamiento de la ansiedad consta de dos componentes: la medicación y la psicoterapia. Las pastillas, los tranquilizantes y los antidepresivos sólo se recetan en casos graves en los que es necesario aliviar los síntomas físicos.
La medicación puede utilizarse para reducir la ansiedad, la inquietud y la preocupación. La persona no notará cómo deja de tener miedo de cada crujido y de cada vaga sombra en el suelo. En este estado, le resultará más fácil someterse a la psicoterapia.
El especialista ayuda al paciente a analizar su vida, encontrar la causa de la fobia y deshacerse de ella. Esto puede cambiar radicalmente la actitud de la persona ante la situación.
Importante: La psicoterapia puede durar varios meses.
En algunos casos, el profesional puede enseñar gradualmente al enfermo a relacionarse con el objeto del miedo. Mostrar vídeos o imágenes de ratones. Poco a poco, el tiempo de contacto aumenta y el paciente empieza a aceptar los roedores de forma relajada.
Miedo A Las Ratas – Autoayuda
A veces, una persona con musofobia puede necesitar utilizar la meditación o el autoentrenamiento. Estos dos métodos ayudan a reducir el pánico, a calmarse y a ordenar sus pensamientos.
Estas técnicas son necesarias para una ayuda rápida.
Puedes ver dibujos animados de ratones o vídeos divertidos para aliviar la tensión. Lo principal es recordar que los roedores no son peligrosos y que pueden ser bastante simpáticos y divertidos. Muchos propietarios de estos animales hacen vídeos de trucos y los cuelgan en Internet.
Los roedores son uno de los problemas más extendidos. Debido al gran número de roedores en las ciudades, la gente se enfrenta cada vez más a ellos. Todo esto conduce a todo tipo de problemas.