octubre 9, 2024
Agirofobia

Agirofobia

¿Que es agirofobia?

La agirofobia es el miedo a cruzar una carretera o calle (incluso una que no esté transitada por coches)

Es la naturaleza humana tener miedo de algo. El miedo al peligro es normal y natural. Las personas experimentan paletas de sentimientos muy diferentes. Por lo tanto, una parte de la excitación puede describirse como miedo, ansiedad, aprehensión. Todo esto es normal para los seres humanos. Los miedos pueden ser congénitos o adquiridos. Las adquiridas, por ejemplo, incluyen la agirofobia. Los miedos innatos son miedos naturales, que incluyen el miedo por la propia vida, la integridad, etc.

Sensación de pérdida de autocontrol

Los miedos adquiridos surgen como resultado de influencias psicológicas del exterior. Por ejemplo, una vez que un niño se asusta de un perro que salta desde detrás de una esquina, puede tener miedo de los perros grandes o pequeños para el resto de su vida. La ansiedad siempre seguirá a un perro, aunque esté paseando tranquilamente cerca, porque la experiencia de verse en peligro por ese animal ya la ha vivido una vez.

Los miedos adquiridos no se pueden tratar con pastillas, inyecciones o cirugía, porque solo existen en la cabeza y la mente. Es necesario trabajar con la psique y las percepciones, el pensamiento y las actitudes ante determinadas situaciones. La comunidad médica considera que la agirofobia es un miedo adquirido. También se denomina dromofobia.

La primera palabra tiene dos significados: cuadrado y remolino. Tal vez el temido miedo provenga del hecho de que los agirofóbicos perciben la carretera como una enorme zona de remolino. La segunda palabra en griego significa correr. Al parecer, cuando se siente la fobia, las personas ven todo como si lo estuvieran filmando a cámara rápida, lo que provoca el consiguiente pánico.

Agirofobia

La agirofobia es el miedo a cruzar una carretera o calle (incluso una que no esté transitada por coches). Los agrofóbicos nunca irán a la tienda más cercana, «al otro lado de la carretera». Elegirán ir a una tienda que esté al lado de su casa, sin prestar atención a la distancia, la pesadez de sus bolsas o el mal tiempo. El miedo resulta ser más fuerte en estos casos.

Los científicos sugieren que la fobia no es una forma innata de miedo porque no está relacionada con el instinto natural de autoconservación (después de todo, el miedo no se basa en los coches en la carretera). Se trata de una fobia adquirida, que se diagnostica con más frecuencia en personas que han nacido y crecido en una zona con muchas carreteras grandes y autopistas ruidosas. Pero hay casos en los que el paciente no ha estado expuesto a las carreteras y al tráfico. Esta fobia tiene diversas manifestaciones:

  • algunos temen acercarse a las autopistas y a las carreteras de varios carriles;
  • y algunos, por el contrario, pueden llegar hasta una carretera, pero cruzarla les resulta más difícil que vivir su vida;
  • algunos agirofóbicos tienen miedo de los caminos rurales arenosos con algunos baches y charcos.

Tipos y causas

Hay muchas variaciones de esta fobia, pero la esencia es la misma: una persona tiene miedo de cruzar la carretera. Los agirofóbicos se dan cuenta de que no importa si hay un paso de peatones delante, si el semáforo está en verde o si se les pide que «crucen» la carretera en un lugar indefinido. El miedo crece a medida que se acercan a la carretera.

Estos tipos de aumento de la ansiedad confirman que la fobia no es congénita, porque no está relacionada con el miedo instintivo (la gente teme la carretera, no por la posibilidad de ser atropellada por un coche inadvertido). Los pacientes no pueden dar una razón, ni pueden decir lo que les asusta.

El miedo irracional impide a la gente cruzar la carretera, pero por lo demás son como los demás: caminando por la carretera y disfrutando de la vida. Los médicos han descubierto qué puede ayudar a los agirofóbicos. Necesitan cruzar la carretera con alguien. Esta persona puede ser cualquiera, desde un desconocido con traje hasta ancianos y escolares. Si hay alguien alrededor, el paciente tiene la impresión de que la otra persona tiene el control:

  • el sombrero no saldrá volando;
  • el coche no saldrá bruscamente;
  • nadie tropezará;
  • el camino no va a ninguna parte.

El miedo no desaparece, pero existe la oportunidad de cruzar la carretera rápidamente y olvidar el calvario.

Algunas personas creen que los accidentes de tráfico pueden ser la causa de la agirofobia. Sin embargo, la gran mayoría de los agiofóbicos afirman que nunca se han visto implicados en un accidente, que no han sido testigos de un suceso horrible y que no han experimentado un accidente de coche en la vida real. Sin embargo, los médicos no descartan la posibilidad de que ver imágenes dramáticas de accidentes de tráfico o perder a un ser querido en un accidente pueda ser la causa de la agirofobia. Los ataques de pánico pueden producirse por inseguridad o por sobreexcitación emocional tras ver las noticias.

Sentimientos de agirofobia

Una persona que tiene miedo de cruzar la carretera puede estar bastante sana y ser adecuada en cualquier otra cuestión, capaz de pensar racionalmente y tomar decisiones. Pero cuando se trata de cruzar la carretera, la parte irracional del pensamiento empieza a prevalecer. A los pacientes les resulta difícil explicar no solo por qué tienen miedo, sino también qué es lo que lo provoca.

Los clínicos han identificado los síntomas físicos de la agirofobia. Se observa que son similares a otras fobias. Por ejemplo, la necesidad de cruzar la carretera puede provocar escalofríos y debilidad en todo el cuerpo y las extremidades pueden temblar y sentir frío. Hay un aumento de la sudoración. Algunos pacientes notan un sudor frío y húmedo. El corazón puede palpitar más rápidamente y usted puede sentirse ansioso.

El dolor abdominal, las náuseas y los vómitos también forman parte de los síntomas. Además, las personas pueden darse la vuelta bruscamente y cambiar de dirección o huir cuando se enfrentan a una aguda sensación de miedo en la carretera. La agirofobia reduce drásticamente la calidad de vida de una persona.

Si la gente tiene miedo de cruzar la carretera porque no ve bien, no es un trastorno. Esta reacción es un temor normal por la vida y la salud.

Agirofobia

Métodos de tratamiento de agirofobia

Hasta ahora, no ha habido ningún tratamiento específico. Se aconseja a las personas agirofóbicas que busquen ayuda especializada de un psicoterapeuta. Es esencial que el terapeuta ayude a encontrar el origen del problema y luego lo erradique. En el transcurso del tratamiento, el psicoterapeuta pide al paciente que dibuje la carretera en una hoja en blanco: cómo es, qué hay en ella y qué hay alrededor. A continuación, se le sugiere que describa con palabras el cruce de la carretera, que exponga sus pensamientos: lo que siente y piensa, cómo se convence de hacerlo y cómo se tranquiliza.

Al analizar las declaraciones del paciente, el médico empieza a ver a través de sus ojos, capta los detalles más pequeños y empieza a trabajar con ellos. Algunos dibujan un bordillo demasiado alto, otros dibujan fosas llenas de lava y otros dibujan una marca que desaparece de repente.

Es importante que los agiofóbicos recuerden que, al comunicarse con el médico de cabecera, no hay que omitir nada, no hay que decir mentiras ni evitar la vergüenza. Aunque haya algunos momentos que queden grabados en tu memoria y te parezcan insignificantes, debes contárselos al especialista. Puede que sean las pequeñas cosas las que causan el miedo.

Las personas cercanas deben prestar atención al agiofóbicos y ofrecerle su ayuda, porque la persona deja de pensar racionalmente cuando ve la carretera. No, no es un psicópata, simplemente le cuesta superar el miedo por sí mismo.